Momentos “Al borde”
Momentos
“Al borde de…”
Elegí”Distancia de Rescate” porque fue uno de los que
nadie había elegido todavía, leí las reseñas de varios de los propuestos y me
llamó la atención que muchos dijeran que era un “relato de terror”, mientras
que otros se referían a él en el género fantástico. Pensé en leer las primeras
páginas y si todavía no me había atrapado buscar otro, sin embargo no fue
necesario porque con todo el suspenso y dudas que me generó tenía que saber cómo
habían llegado hasta ahí.
Empecé mi diario de lectura haciendo anotaciones de cada
detalle en el principio porque no entendía quién era el/la narrador/a debido a
que la historia era una conversación del presente en la que volvían
continuamente al pasado.
Gusanos,
¿cuándo aparecen los gusanos?
Primero entendí que Carla era diez años más grande que la
narradora y la madre de David (el de la letra cursiva, el que acompaña a la
narradora), después entendí que había otra mamá de la nena llamada Nina, estas
últimas venían de Buenos Aires Capital hacia el campo donde los dos primeros vivieron
toda la vida. Más adelante mencionan el nombre de la segunda madre (Amanda) y
ya queda más claro que ella es la que narra la historia desde su punto de
vista.
En su momento me
pregunté si eran lesbianas porque se la pasaba diciendo cosas como: “Hay algo
de mutua fascinación entre nosotras” o “Me gustó desde el principio, desde el
día en que la vi cargando los dos baldes de plástico bajo el sol, con su gran
rodete pelirrojo y su jardinero de jean […]”, además eran dos esposas a las que
sus parejas no le prestaban tanta atención por lo que se entendía ante la poca
mención de ambos, podría haber sido pero no.
*Me llama la atención el hecho de que Carla se
persiguiera por cuantos dedos tenía David a la hora de haber nacido porque no
podía creer que todo hubiese salido bien. Me pareció un indicio de algo que más
adelante iba a empeorar.
David se la pasa
diciendo que hay que concentrarse en los detalles y eso me hace ser cuidadosa y
prestar suma atención a todo, anoto cualquier cosa cómo: Señor Geser es el
cuidador de la casa, Omar es el marido de Carla y es un criador de caballos,
Carla no quiere entrar a la casa donde se está quedando Amanda, le cuesta
avanzar en la historia por lo que le inyectan las enfermeras, “no vas a querer que juegue con él” y “Era
mío. Ahora ya no”. Con esas últimas frases pensé que tal vez se iba a tratar de
una novela sobre uno de los hijos desaparecidos de la dictadura ya que varios
de los libros propuestos hablaban sobre el tema.
Anoto: 1er conflicto con David (porque sentía que iba a
haber más), padrillo se escapa, toma agua de un lago y Carla aclara en su
relato que ve un pájaro muerto cerca y eso ya me da un mal presentimiento, por
dentro pienso Por qué llevó a David? El agua del lago, algo tiene y David se
chupa los dedos mojados, esta todo mojado.
El padrillo se enferma, yo sabía que algo malo tenía el agua y me dan
ganas de llorar al leer la desesperación de Carla.
Hay un corte en la
tensión, Amanda empieza a pensar en la “distancia de rescate” eso me descoloca
de la angustia que me estaba generando la historia. Aparece “la mujer de la
casa verde”, ¿será verde por algo en especial?
Busco “casa verde” en google y me aparece una novela llamada “La casa verde” de Mario Vargas Llosa
que no se relaciona con lo que estoy leyendo y luego la definición de Casa
Verde que es un cuartel general y campamento de las fuerzas armadas
colombianas, tampoco lo puedo relacionar. Pero el significado del color verde
en sí tiene que ver con todo lo natural, simbolizando también la vida, la fertilidad
y la buena salud. Esto me cierra más. Una curandera vive ahí, me extraña que en
este momento de tanta incertidumbre Carla ya no este angustiada cómo antes.
Migración, mudar
el espíritu de David a otro cuerpo y parte de la intoxicación se va con él. Otro espíritu llega al cuerpo enfermo, algo de
cada uno queda en el otro y ya no sería lo mismo.
“No era algo seguro, pero a veces funcionaba”, ya ha
pasado antes entonces.
*Menciona mucho el agua
El momento en el que David es consciente de su dolor me
hizo llorar un poco mientras iba en el colectivo, justo en ese momento un
hombre sube y empieza a gritar “No soy ladrón”. Me asusté y guardé el celular.
Vuelvo a leer al siguiente día, me cuestiono si parte de
David no está dentro de Amanda cuando le dice “Sí entendés, Amanda, entendés
perfectamente”.
Me encanta como logra generar tanto suspenso ante la
revelación del “nuevo David”, es fuerte leer el rechazo de una madre ante su
propio hijo. Entiendo en parte a Carla porque
creía en las palabras de la curandera por lo que esa persona ya no era
su hijo en su mente pero al ver que lo llamaba “monstruo” se me encoje un poco
el corazón por él. David dice que es un chico normal, ¿lo es?
Ubicación donde está siendo contada y transcurre la
historia: En un cuarto de la salita de emergencias.
Amanda: ¿indicios de depresión o tal vez algo más? “… y a veces me asusta pensar que los
problemas de todos los días puedan ser para mí un poco más terribles que para
el resto de la gente”.
Hable con mi mamá sobre”la distancia de rescate” porque
no entendía si la madre era obsesiva y estaba sobreprotegiendo a la hija o si era algo normal en la
relación. Me dijo que por lo general siempre esta esa precaución ante todos los
riesgos en los que tu hijo puede llegar a ser afectado.
“Esto no es normal, David. Solo hay oscuridad, y me hablas al oído. Ni siquiera sé si
realmente esto está sucediendo” ¿Otro indicio de que parte de él está dentro de
ella?
*Nina cree que el diálogo señorial es en plural, David
comenta que le gusta lo del “plural”, constantemente habla de un hilo que las
une.
Aparece Abigail, hija de vendedora, está enferma. Su
cabeza es muy grande y tiene una pierna más corta que la otra, Amanda le
pregunta a David si parte de él está ahí y dice que son “historias de su
madre”.
-Al perro le falta una pata trasera (Abigail?)
Amanda ya no ve en Carla alguien en quien confiar, le genera inseguridad su
presencia, no entiende que es lo que le pasa. Carla no puede con ella misma,
haber vivido tremenda situación produjo algo dentro de ella.
David físicamente: Manchas blancas en la piel, ojos
rojos, piel alrededor de la boca y alrededor de los ojos es más rosada. (Había
hecho un dibujo en mi cuaderno de cómo me lo imaginaba y no lo muestro porque
me da vergüenza)
“No sos vos lo que me asusta”, tiene miedo de que
contagie a Nina con la enfermedad que tiene.
El sueño anticipa algo, lo voy a tener en cuenta para más
adelante.
En el intento de ser mejor “persona”, Amanda va a
arruinarlo todo seguramente. Se tiene que ir de una buena vez de ese lugar.
Bidones, usan guantes largos de plástico para llevarlos,
deben contener algo que no puede estar en contacto con la piel y uno se cayó al
bajarlo del camión. Nina se sienta cerca y ya sé que algo le va a pasar,
también a Amanda.
Ay no, está toda mojada y solo dice que es el rocío. Nina
lo huele y dice que es feo, es un líquido que deben usar en el campo para algo
y que es tóxico para los humanos.
David quiere evitar hablar de él. Estaba enterrando un
pato, ¿indicio de psicosis? No, lo busqué y solo sería un inicio si disfrutara
de verlo muerto y él lloraba al enterrarlo.
Por un momento pienso que tal vez David tiene poderes y
es él el que mata a los animales. Por eso Carla le tiene tanto miedo.
*David está en pijama, debe ser la salita de emergencia
donde va las noches que no está en su cama.
Amanda besa las manos de Nina, Carla le da bizcochitos y los agarra. Esas
manos tocaron lo que sea que estaba en el piso, va a pasarle lo mismo que a
David.
Si la enfermera tiene un hijo que va a la famosa sala de
espera debería haber pensado que tal vez el problema no era una mera
insolación.
Carla está obsesionada con encontrar el espíritu de
David. Cree que todo es obra de algo sobrenatural, una maldición y lo culpa a
él y a ella misma por eso.
“Algunos ya nacieron envenenados, por algo que sus madres
aspiraron en el aire, por algo que comieron o tocaron” es una toxina del campo.
Todo lo que lleva a que el hilo se rompa, la descripción,
me pareció súper dura. El vínculo de una madre con su hija, rompiéndose y no
pudiendo hacer nada al respecto. Que desesperación. Y para colmo no poder
despedirte correctamente de tu hija, morirse sin saber lo que va a ser de ella
y sin entender qué es lo que pasa en ese bendito pueblo debe ser horrible.
“Ahora voy a empujarte. Yo empujo a los patos, empujo al
perro del señor Geser, a los caballos”, los ayuda a morir o al menos a dejar de
sufrir. Él solo puede notar que están enfermos porque ya lo vivió, no los mata.
Los padres parecen mucho más fríos ante sus hijos, se
mantienen con la fachada de “macho” que implica ser hombre y sobre todo para
Omar que vive en el campo.
Hilos atados por doquier, la distancia de rescate, el
hilo que se había desprendido me viene a la mente.
Parte de Nina está dentro de David o el último quiere
ayudar al marido de la narradora a entender que le pasa.
No entiendo el final, ¿se supone que es una metáfora ante
la contaminación del veneno o los desechos en general? ¿Qué es lo importante
exactamente? ¿Que no podemos ver que lo que más nos mata es pura creación
nuestra?
---------------+
La verdad superó mis expectativas, creía que iba a ser un
libro que no me iba a interesar mucho y que me iba a resultar tedioso pero
logró atraparme verdaderamente por más de que lo leí lento y me costó hacer el
trabajo por distintas razones, lo leí dos veces y no fue ninguna molestia. Al
leerlo la segunda vez pude observar detalles que tal vez antes no había notado
y me encantó poder darme cuenta de cómo la autora desde un principio te viene preparando
para lo que va a pasar y cómo siempre te está dando la respuesta pero hasta que
no llegás al final no podés darte cuenta que lo supiste siempre. Ya le
recomendé este libro a una amiga y ella me recomendó uno que leyó en su escuela
(“100 años de soledad” creo que era el nombre). Aprendí mucho sobre la
intoxicación por agrotóxicos en la soja y cómo puede meterse en tu organismo de
distintas maneras por lo que hay que tener suma precaución, también incorporé
un poco de información maternal gracias a mi propia madre ya que cuando le
preguntaba si Amanda o Carla no eran exageradas y empezaba a contarme como
había sido cuidarme durante todo este tiempo.
Disfruté la lectura, tal vez no tanto el proceso de
transcribir todo mi diario a un Word porque soy muy desordenada y acorto muchas
cosas asique tuve que arreglar varias cosas para darle un sentido. Si vieran
mis diarios de lectura se darían cuenta que es más divertido en papel porque me
gusta hacer dibujos (por más que no sepa dibujar muy bien) y hago muchos
comentarios.
Decidí titularlo "Momentos 'al borde'" porque siempre estaba al borde de las lágrimas, al borde de gritar, al borde de dejar de leerlo, al borde con mi papá y así con distintas cosas, me pareció un título adecuado para resumir todo lo que me generó el libro.

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